Hoy toca volver al estibador o a l’estibador. Quizás suene tópico lo de que este reportaje es especial y diferente, porque al fin y al cabo todos los son y todos tienen su historia detrás. Para no aburriros, os pongo en antecedentes en plan telegráfico.
Guiomar, chica valenciana, se va a trabajar a Burdeos. Eso está al otro lado de los Pirineos, para los despistados.
Allí conoce a un jugador de Hockey y y se enamora locamente de él tras verlo sin camiseta durante un partido -esto es una licencia que me tomo, pero ¡quien sabe si pasó así en realidad!-.
Tras una bonita historia de amor, deciden casarse. Y ante la duda de si se casan en Valencia o Burdeos, una solución salomónica. Se casan dos veces, así doble fiesta, y ¡doble reportaje de boda!
Mickaël estaba alojado en el Hotel Silken de Valencia. Como estuvimos prácticamente solos tuvimos tiempo para hacer tranquilamente las fotos, incluso ver algo del partido de tenis de Roland Garros, que jugaba Nadal.
Para su boda en Burdeos, eligieron a la fotógrafa Elodie, de un gusto exquisito. La foto que veis abajo corresponde precisamente a su reportaje. Tanto ellos como sus padres son grandes aficionados a la fotografía.
El vestido de novia de Guiomar es de la Colección Aire de Barcelona, que lucía fantástico en las dunas al lado de la playa en esta boda en L’Estibador.
Los zapatos, de Florence Kooijman, una tienda donde los hacen a medida en Burdeos.
La ceremonia y cena se celebró al ladito de la playa, en el restaurante L´stibador. Vale que no estamos en la Riviera Maya, pero estas bodas tienen un puntito de frescura que van muy en sintonía con la personalidad de esta pareja, risueños como ellos solos. La boda estuvo llena de detalles muy preparados y divertidos, y así consiguieron que las fotos de la boda fueran muy originales y divertidas.
Unos cuantos globos dieron la nota divertida y son un detalle fácil de conseguir y que ayudan mucho a olvidarse de que os están haciendo fotos. ¡Gran idea! Fueron proporcionados por El Globo de Lola.
Los detalles de las invitaciones, minutas y otros elementos de papelería para esta boda eran muy originales. Le hicieron el encargo a la empresa online http://enunclip.com para que se encargara de ello.
Un par de días antes dimos un paseo por el centro de Valencia, pues hasta entonces yo aún no conocía en persona a Mickaël, y realizamos su sesión de fotos preboda. Trabajo mucho con parejas internacionales, ahora se puede decir que soy un Spain Wedding photographer total o mejor dicho, un Photographe de mariage en Valencia, para los franceses que acudieron a esta boda.
Una experiencia en la que me lo pasé genial como fotógrafo, y no solo por lo bonito del salón o lo divertido de la fiesta, la barra libre o las chuches, sino especialmente por la buena sintonía que tuve con los novios pero también con la familia. ¡Gente guapa por dentro y por fuera!